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Aterrizamos desde España en el aeropuerto internacional de Keflavik. La primera noche la pasamos cerca del aeropuerto en el hotel Base Hotel by Keflavik airport.

Llegada a Keflavik

Os aconsejamos que si llegáis por la noche, concretéis la hora de llegada con el hotel y también reservéis un transfer, ya que los taxis no abundan en el aeropuerto y podéis llegar a estar un buen rato esperando la llegada de uno.

A la mañana siguiente fuimos a recoger la furgoneta que teníamos reservada para los próximos 9 días con Happy Campers. Nosotros alquilamos su modelo Nissan NV200, que aunque es más pequeña que una camper normal tienen bastante bien optimizado el espacio, con cocina dentro de la furgo y la cama con doble posición permitiendo poder estar sentado mientras cocinas los días de lluvia y frío. La verdad que pensábamos que nos íbamos a agobiar con el tamaño de la furgo, pero fue bastante cómoda para los 9 días que estuvimos. Es cierto que nos somos muy altos ninguno de los dos, si soy altos mejor alquilar otra.

Cascada Gullfoss

Esta cascada es uno de los puntos que conforman el círculo dorado de Islandia. Para ser la primera cascada que veíamos en el país, fue de las más grandes e imponentes. El sonido atronador del agua te recuerda lo pequeños que somos y la fuerza del agua. El gran pero de la visita, pero inevitable, fue la multitud de personas que estábamos visitándola. Aquello parecía la gran vía madrileña en plenas rebajas. Una procesión de personas recorríamos el borde de la cascada para ver la caída del agua desde cerca, hay que reconocer que se perdía un poco la magia de lugar con tanta gente.

Fue la primera bajada a la realidad del viaje. Es cierto que Islandia tiene paisajes bellísimos y vírgenes pero esas fotos de postal en las que no hay nadie, es difícil de presenciarlas al no ser que seas madrugador.

Geyser

Geysir, Iceland
Otro de los puntos que pertenecen al círculo dorado del país. Si nunca has visto un Geyser es bastante curioso el estallido de agua a presión que sale del interior de la tierra. Cada 5-10 minutos el geyser expulsa agua ardiendo y genera una nube de agua que tienes que esquivar dependiendo de donde estés ubicado.

Nosotros además de esperar varias veces el estallido del geyser, subimos una colina cercana para ver el valle que hay al otro lado y también ver el geyser desde otra perspectiva.

Cascada Seljalandfoss y Gljúrfrafoss

Seljalandsfoss
El final del día lo pasamos en el camping que hay en los pies de la cascada Seljalandfoss. Pudimos cenar con vistas y el sonido del agua. Al estar tan cerquita de las dos cascadas puedes hacer una excursión nocturna bastante exclusiva, ya que no son muchos los que se acercan a estas horas. Además, si tienes suerte y el cielo esta despejado, puedes verlas con las luces de la aurora boreal. Este fue el primer día que pudimos contemplarla y aunque suene a tópico, fue maravillosa la experiencia aunque estuviéramos a menos de 0º.

 

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